viernes, 18 de abril de 2008

El desastre andalucista

Fuente: Lista de distribución de Andalucía Libre
Las fuerzas integradas en la Coalición Andalucista (Partido Andalucista, más PSA, más otros) obtuvieron en 2004, 377.164 votos. Cuatro años después sólo mantienen el 32,8% de ese respaldo, perdiendo el 67,18%: 152.674 sufragios. En las elecciones españolas el andalucismo regionalista ha retrocedido del 4,04% nacional de 2004 (181.868 votos) a un escuálido 1,53% (68.334). En las andaluzas, de 275.674 (6,16%) ha bajado a 123.776 (2,76%). Mirando circunscripciones, en Almería los andalucistas obtienen el 1,04%, en Jaén, el 1,83%, en Granada, el 1,59% y en Cádiz, el 4,19%. En las ciudades, sus datos son dramáticos: 0,94% en Almería; 4,06% en Algeciras; 2,36% en Cádiz; 3,48% en Jerez (donde Pacheco ha sido alcalde durante quinquenios); 2,15% en Córdoba; 1,20% en Granada; 2,00% en Huelva; 1,16% en Jaén; 1,30% en Linares; 1,64% en Málaga; 1,67% en Marbella; 2,63% en Dos Hermanas y 2,52% en Sevilla (donde hace años ostentó la alcaldía). Los resultados obtenidos no son sino la consecuencia previsible del agotamiento terminal del discurso regionalista. Su incoherencia, cobardía y españolismo han terminado por condenarle a la irrelevancia parlamentaria. Años de oportunismo, han facilitado que el andalucismo regionalista sea considerado electoral y políticamente innecesario. Las prácticas y discursos de los Rojas Marcos, Pacheco, Pérez Bueno, Ortega, Del Olmo, Aranda, Villar, Aroca, Checa, Egea, Benavides y tantos más, se han demostrado no sólo reaccionarios sino también inútiles. Aquí están las consecuencias de no oponerse nunca a España y de competir con PSOE, PP y PCE-IU en verborrea españolista en cada caso y circunstancia, poniendo su referencia pretendidamente andalucista al servicio de España. Su insistencia extenuante en una retórica dependentista anticatalana y antivasca ha terminado por favorecer el traspaso de buena parte de su electorado a quienes ejercen de españoles sin atenuantes ni añadidos: el PP y el PSOE. Faltos de norte político y de escrúpulos éticos, los andalucistas no han tenido problemas en formalizar coaliciones municipales o nacionales no sólo con el PSOE sino también con el españolismo extremo del PP, desautorizándose a si mismos como fuerza política necesaria por la vía de los hechos, porque ¿quién puede ser admitido como socio por el PP si no tiene bien acreditado su españolismo?. Desprovistos así de perfiles propios y sin proyecto nacional alguno, no han generado conciencia nacional, sino al contrario. Los andalucistas nunca han entendido que aunque PNV, CiU y otras fuerzas nacionalistas moderadas puedan hacer en la práctica política regionalista, lo hacen siempre desde una previa identidad política claramente nacionalista –en la que su nación siempre esta claro que no es España y en la que siempre se reservan, al menos formalmente, su derecho a la soberanía y a la autodeterminación nacional- que es la que le permite luego justificar ante su electorado sus hechos por pragmatismo o cualesquiera razones y mantenerlo. Por el contrario, son miles los ejemplos en los que –incluso durante esta ultima campaña y en televisión- los andalucistas han acreditado que cuando piensan realmente en algo ‘nacional’ están refiriéndose a España y nunca a Andalucía. En resumen, en treinta años no ha habido líder andalucista que haya dicho públicamente ante una cámara de televisión que no es español sino andaluz; que Andalucía es una Nación porque lo es; que esta en contra de la dependencia de Andalucía en relación a España y a favor de la Soberanía Nacional y la Autodeterminación de Andalucía. Por el contrario, todos los que han representado al andalucismo se han reafirmado en cada oportunidad en su españolidad, en el sometimiento llorica y en el agravio comparativo. El equipo de Julián Álvarez se ha quedado sólo al principio del camino en la revisión del curso andalucista y como suele ocurrir en estos casos ha pagado su inconsecuencia. Aunque fuera a trompicones –plagiando textos ajenos de mala manera y con argumentos torcidos y torpes- llegó a asumir el ‘no’ puntual al nuevo Estatuto, pero luego ha sido incapaz de mantenerlo y desarrollarlo como eje de una línea política. Le ha puesto sordina, avergonzándose de lo que era su principal seña de identidad nueva, sustituyéndola por propuestas, que no por peregrinas dejaban de ser menos estupidas, como su reiterada defensa de un 'Gobierno tripartito PP-PA-IU', justificada únicamente como medio para excluir al PSOE (con quien había gobernado en coalición no hace mucho). La coalición PA-PSA ha sido nefasta, no tanto por ella en si misma o por lo insustancial de sus propuestas o por su alucinante propaganda e imagen como porque se ha hecho sobre las bases políticas del andalucismo de siempre (que el PSA ha mantenido sin siquiera las dudas y ambigüedades del PA de la etapa Álvarez) que son las que se han transmitido a la población andaluza. Los desastrosos resultados están a la vista. Inserto en la crisis postelectoral, los primeros datos que trascienden del ámbito andalucista indican un empecinamiento en el error que les ha conducido al fracaso. No se atisban en su seno pronunciamientos y proyectos realmente refundadores y que postulen un giro nacional y de izquierdas. En el andalucismo domina un silencio sepulcral, sólo alterado por el runruneo de las navajas entre los dinosaurios que disputan por el cargo de enterrador. A día de hoy no aparecen en el espacio andalucista plataformas políticas programaticamente nacionalistas, antes al contrario, los rumores sobre las candidaturas alternativas para su Congreso extraordinario de Junio se limitan a la posible postulación del alcalde de Utrera, Curro Jiménez –caracterizado españolista, bien conocido por sus serviles homenajes a los Borbones y al ejercito español-; Pilar González –portavoz parlamentaria que ha reproducido a lo largo de sus discursos y trayectoria todos los tics crónicos del regionalismo- o Manuel María de Bernardoalcalde de San Fernando en alianza con el PP-, tres variantes que ubican al andalucismo en una perspectiva de extinción cierta.

sábado, 29 de marzo de 2008

El PSA propone al PA la disolución de ambos y crear otro partido

Fuente : EFE y Diario de Sevilla
El Comité Ejecutivo Nacional del PSA ha propuesto que, tras la celebración de los congresos extraordinarios del PA y PSA -previstos en junio-, se celebre una convención constituyente de una nueva formación política que nacería en otoño y que supondría la desaparición por separado de ambas formaciones.
El vicesecretario del PSA, Juan Román, explicó ayer que serán los congresos extraordinarios de ambas formaciones -previstos el 7 y 8 de junio en el caso del PA y el 28 y 29 de junio en el del PSA- los que decidan la disolución de las dos fuerzas para dar paso al nuevo partido político que nacería entre octubre y noviembre.
El PA elige hoy al comité roganizador del congreso extraordinario en junio.

jueves, 27 de marzo de 2008

En 1997, el PIB per cápita era (en términos comparables pues no existía el euro) de 9.464 euros en Andalucía y de 12.731 en España.

La distancia era así de 3.267 euros.

A cierre de 2007, esa diferencia ha aumentado un 56% y se ha superado los cinco mil euros (5.098).

Esta es la convergencia de la que presume el PSOE.

Si quieres ver la nota de prensa completa del Instituto Nacional de Estadística (INE) pica en el enlace siguiente: http://www.ine.es/prensa/np495.pdf

lunes, 17 de marzo de 2008

El catedrático Lacomba ve un error CA y complicado que resurja el andalucismo

Málaga, 16 mar (EFE)

El catedrático de la Universidad de Málaga e investigador del andalucismo histórico Juan Antonio Lacomba cree un "error" la Coalición Andalucista (CA), en la que ha concurrido el Partido Andalucista (PA) a las elecciones, y ve complicado que resurja el andalucismo tras convertirse en extraparlamentario.

Lacomba, poseedor de la Medalla de Andalucía y autor de obras como "Regionalismo y autonomía en la Andalucía contemporánea", dice en una entrevista con Efe que para que el andalucismo haya salido del Parlamento andaluz ha sido "decisiva" la visión ciudadana de "la nueva unión del PA y el PSA" porque "un partido que se parte, se rejunta y se vuelve a partir y a rejuntar, empieza a no ser creído".

Ha destacado que ello unido al hecho de "recibir a todos los grupúsculos que pudieran llamar al andalucismo es una amalgama electoral que no se digiere bien" con nueve fuerzas "muy heterogéneas, desde radicales independentistas a grupos moderados", y que "todo eso en el contexto de unas elecciones enormemente polarizadas da el resultado que ha venido: que no tiene ninguna representación".

En este sentido, ha precisado que otra cosa hubiera sido que la unión del PA y PSA "se hubiera hecho hace tiempo y se explicara bien que va a llevar a un nuevo partido" y que cuando se enteró de la coalición poco antes de los comicios pensó que era "un error porque la gente no lo iba a entender e iba a castigarlo".

Ha recordado a Efe que cuando el PA gobernó junto al PSOE "no supo poner una marca clara que singularizara su presencia en el Ejecutivo" y "en las encuestas la gente no sabía que el PA gobernaba, pensaba que sólo lo hacían los socialistas".

Sobre si podría resurgir el andalucismo o ésta es la puntilla definitiva para este movimiento político, ve complicado su renacer y advierte de que "exigiría una clarificación ideológica" y de programa y que en esta situación "ponerlo en marcha de la nada es una travesía del desierto tremenda, muy difícil".

Ha añadido que "los andaluces se sienten andaluces, pero una cosa es el sentimiento andaluz y otra la conciencia andaluza" y que "para penetrar en la sociedad andaluza hay que hacerlo con una ideología muy clara, con una limpieza enorme, con un programa muy bien pensado sin mezcla de grupos heterogéneos".

También ve muy complicado que todas las formaciones de la coalición creen un partido.

El catedrático resalta que el andalucismo "nunca tuvo claridad de programa e ideológica y nunca ha contado con poderes mediáticos que le ayude" y que "el PSA y luego el PA han tenido enormemente difícil llegar a la gente, ya que casi han tenido un rechazo mediático y es muy difícil que sus ideas lleguen claramente".

Ha insistido en que la coalición ha sido un error porque "los electores ya habían rechazado" rupturas y reconciliaciones con dificultades "aireadas durante mucho tiempo"; que "la gente quiere coherencia" y piensa que "como son las elecciones se juntan"; que "la coalición se deslizaba por la confusión" y que parecía "una amalgama montada sobre la marcha: arrancó con el PSA y el PA, pero luego se han ido añadiendo grupos dispares".

Juan Antonio Lacomba considera que al no ser elecciones andaluzas en solitario, sino mezcladas con las generales, "Andalucía queda un poco solapada" y que "el mensaje de un partido como el andalucista es un mensaje en elecciones propias" y "al ir mezclado, solapado por la política nacional, no se les escucha".

Cree que con la Coalición Andalucista se daban todas las circunstancias "para ser barrida" como ha ocurrido.

domingo, 16 de marzo de 2008

El PA resolverá la renovación de su dirección y la unión al PSA en junio

Fuente: Diario de Sevilla - Grupo Joly - Charo Solís
Una comisión trabajará para que concurra una "candidatura única" al congreso extraordinario · Llamada a la disciplina interna tras las peticiones de cese de Álvarez
Los andalucistas tienen una cita los próximos 7 y 8 de junio para despejar la incógnita de cuál será su futuro. El Comité Nacional del PA, reunido ayer en Antequera (Málaga), aprobó por unanimidad celebrar en estas fechas un congreso extraordinario que abordará dos cuestiones claves: la renovación de la dirección y la unión al PSA y al resto de fuerzas que se sumaron a la reciente propuesta electoral de Coalición Andalucista.
En la organización del cónclave jugarán un papel fundamental tres comisiones creadas a tal efecto y cuya función será: analizar las causas de los "pésimos resultados" en las urnas -que les ha llevado a desaparecer del Parlamento-, proponer las vías para la unificación y medidas para afianzar la cohesión interna. De entre ellas, será esta última, que dirigirá la todavía portavoz parlamentaria Pilar González, la más decisiva ya que, según explicaron fuentes del partido, ante la probable concurrencia de más de una candidatura alternativa a la del actual secretario general, Julián Álvarez, su función será intentar "integrar" todas las sensibilidades para que sea una "candidatura única" la que llegue al congreso.
Aunque está por ver si la adhesión al PSA es tan irreversible como hace cuatro meses preconizaban ambos partidos, la comisión que capitaneará el ex número uno al Parlamento del PA por Cádiz, Manuel Prado, será la encargada de diseñar las fórmulas para esa posible unificación. "El PA es el partido mayoritario y el que debe llevar el peso en este proceso, por eso, se plantearán propuestas de cómo debe ser y luego se presentarán a los demás partidos", explicó Prado, que vio "buen ambiente" para esta fusión de siglas.
A pesar de la calma y la unanimidad alcanzada en todas las decisiones, en el Comité Nacional del PA también hubo espacio para la reprimenda, según informaron estas fuentes. La tensión interna provocada estos últimos días por las peticiones de no adhesión al PSA y de dimisión de su líder, Julián Álvarez, formuladas por algunas agrupaciones y cargos orgánicos del partido -que contaron con el rechazo de la Ejecutiva Nacional para evitar el "desgobierno"-, llevó a los miembros del Comité a hacer un llamamiento a la "disciplina interna", instando a quienes discrepen a no hacerlo públicamente y esperar al foro adecuado, es decir, al congreso de junio.

Comentarios a esta noticia en Diario de Sevilla

4 Paco 16.03.2008, 12:13

¿Y si los andaluces son felices como están?
¿Y si los andaluces se encuentran identificados como tales en el PSOE o en el PP?
¿Y si los andaluces no quieren, necesitan,. . . definirse como pueblo mas allá de ser exclusivamente españoles?
El andalucismo siempre habla de Andalucía, nunca de los andaluces: o encuentran un proyecto por y para los andaluces o nunca existirá esa Andalucía de la que hablan a boca, iba a decir llena, vacía.

3 pepe 16.03.2008, 11:39

Con comentarios como el de josebas se entiende la situación del andalucismo. Dos andalucistas trs opiniones y cuatro insultos. Así no llega ningún mensaje bueno al pueblo, simplemente porque NO HAY MENSAJE.

2 Josebas 16.03.2008, 11:31

Si a Pedro Pacheco lo declaran "non grato", adelante.

1 Rafael 16.03.2008, 09:09

Esta posibilidad, este nuevo partido, este proyecto de una voz propia y diferenciada (sin vaivenes, sin folkore, con programa), es necesaria para Andalucía. Vamos a ser serios de una vez por todas.

jueves, 13 de marzo de 2008

El escenario andaluz

Fuente: Diario de Sevilla
Autora: Ana M. Carmona Contreras
Los resultados de las elecciones andaluzas nos ofrecen un escenario en el que sus protagonistas principales, aunque con algunos matices dignos de reseñar, siguen siendo los mismos. Junto a la indiscutible victoria del Partido Socialista en los comicios autonómicos, que vuelve a lograr la mayoría absoluta y revalida a Chaves al frente del gobierno de nuestra Comunidad Autónoma por sexta vez consecutiva, emerge un significativo contrapunto: la tendencia descendente que experimenta dicha fuerza política y que se concreta, por un lado, en la pérdida de cinco escaños (de 61 baja a 56) y, asimismo, en la merma en el número de votos obtenidos (164.000 menos) con respecto a las generales.
Cabe interpretar ambas circunstancias como la expresión por parte del electorado de un cierto hartazgo hacia la hegemonía socialista en Andalucía, que es objeto de un significativo toque de atención. En esta coyuntura, la amable cohabitación que hasta ahora se ha mantenido con el Gobierno central debería servir como acicate político para impulsar en la nueva legislatura el desarrollo efectivo de las transferencias pendientes tras la entrada en vigor del nuevo Estatuto.
Por su parte, aunque el Partido Popular vuelve a ocupar el ya habitual segundo puesto, su derrota ha venido acompañada de una mejora evidente en los resultados: de 37 diputados autonómicos en la anterior legislatura, pasa a obtener ahora 47. El avance es ciertamente espectacular e indica una tendencia al alza que con el transcurso del tiempo podría cristalizar en un cambio de gobierno. Queda, sin embargo, mucho camino por recorrer en este sentido y cabe preguntarse si Javier Arenas, confirmado como líder de su partido en Andalucía, será la persona idónea para lograr acabar con el monopolio socialista. Dejando a un lado tal incógnita, lo que parece claro es que el electorado ha premiado la actitud dialogante que en el proceso de gestación estatutaria han mantenido los populares. A pesar de las imputaciones de escaso convencimiento reformador formuladas desde las filas socialistas, puede considerarse que el PP ha logrado redimirse del pecado original del 28-F y de la rémora histórica que ello le ha supuesto. De cara a la nueva legislatura habrá que ver si la nueva orientación se confirma o no al afrontar la ardua tarea de adaptación interna del ordenamiento andaluz a los nuevos contenidos del Estatuto.
Y por lo que se refiere a los secundarios, a las minorías que enriquecen el mapa político autonómico y matizan siquiera sea muy levemente la acentuada bipolarización que lo caracteriza, se detectan deslumbrantes luces y tétricas sombras.
El rayo de luz lo constituye sin ningún género de dudas el resultado obtenido por Izquierda Unida. Distintos factores han contribuido a dotar de particular realce el mantenimiento de los seis diputados con los que ya contaba dicha fuerza política en la anterior legislatura. El agrio proceso interno que precedió a la elaboración de las candidaturas en nuestra Comunidad, situando como cabeza de lista por Sevilla a J.M. Sánchez Gordillo y desplazando a D. Valderas a la circunscripción electoral de Huelva dejó a este último en una precaria situación. En esta tesitura, los resultados de IU en Andalucía deben interpretarse claramente como un triunfo personal de éste. Ahora bien, no cabe olvidar que la crisis de las listas se cerró en falso y la paz no ha llegado a sus filas. Aprobado el examen en las urnas queda por superar la reválida que supone la necesidad de conciliar las distintas sensibilidades que coexisten en su seno. Como fuerza situada a la izquierda de los socialistas, corresponde a este grupo político ser la voz más progresista de nuestro parlamento, marcando la diferencia con el gobierno. En este sentido, el apoyo recibido por el electorado andaluz ha trazado significativas distancias frente a la tentación del voto útil que, en clave nacional, ha conducido directamente al hundimiento de la coalición.
El escenario político autonómico se completa con el sombrío páramo al que han sido desterrados los andalucistas. Profundamente lastrados por la muy deficiente gestión de su rechazo al nuevo Estatuto de autonomía, la coalición liderada por Julián Álvarez entra en una situación de quiebra técnica. La errática política mantenida por los andalucistas, causa fundamental de la fuga de votos, les obliga a una profunda reflexión que les salve de su actual situación: una especie en vías de extinción.
Podemos concluir formulando algunas hipótesis de trabajo para la legislatura que se inicia:
  1. Con los presentes resultados electorales, basar las actuaciones gubernamentales en la aritmética parlamentaria resulta condición necesaria pero no suficiente. Hay que dar paso a otra forma de gobernar.
  2. Corresponde a los populares convencer de que su renovado espíritu autonómico es efectivo y real.
  3. Más compleja es la tarea de Izquierda Unida que ha de poner orden a nivel interno y, asimismo, proyectar una línea de progresismo e innovación frente al status quo socialista.
  4. El ostracismo institucional que toca a los andalucistas debe servirles para rectificar, intentando recuperar el discurso nacionalista que durante años ha captado la adhesión de un sector no irrelevante de andaluces.

Curro Jiménez en Diario de Sevilla

Resumen de asuntos sobre Andalucismo que han aparecido en un encuentro digital celebrado en Diario de Sevilla con Francisco Jiménez (Alcalde de Utrera):


4. diego (14.02.2008, 21:17): ¿Cómo se puede ser el mejor alcalde del pueblo. ¡Viva Curro Jiménez! Andalucía va mejor con andalucistas como tú. Corrupción cero. ¡Viva Curro!

¡Muchas gracias hombre!

5. Juan Antonio (14.02.2008, 21:21): Como miembro de un partido nacionalista andaluz y de izquierdas, ¿no cree que es incompatible organizar actos de homenaje a príncipes españoles, al ejército español y repartir banderas españolas? ¿Cómo lo explica? ¿No cree que ese fomento del españolismo es perjudicial y contrario a desarrollar una conciencia nacional andaluza? ¿Es esa una forma adecuada de contribuir a la liberación de la nación andaluza? Gracias.

Soy alcalde de todos los utreranos. Yo salí elegido por el PA, pero evidentemente gobierno para toda Utrera, y todo lo que sea bueno para Utrera lo llevaré a cabo aunque no sea el ideario político de un partido en concreto. En cuanto a contribuir a la nación andaluza, creo que lo mejor que puedo hacer es gobernar de la mejor manera posible a Utrera.
19. LUIS (16.02.2008, 17:06): Siendo uno de los pocos alcaldes andalucistas, ¿cómo ve el futuro del andalucismo?

Es un momento clave y difícil. Espero y confío que tarde o temprano el pueblo andaluz recupere una ilusión que yo nunca he perdido.
21. Jose (16.02.2008, 19:29): Señor Jiménez, me gustaría saber ¿para cuándo un andalucismo con ideología e identidad propia?, estamos cansados de conocer las convivencias que hacen a derecha o izquierda con el fin de estar en el poder. La ciudadanía andaluza necesita confianza y sereidad y no partidos veletas. Gracias

Yo al menos no me siento veleta de nadie, y como botón de muestra los cuatro años en los que estuve gobernando en minoría teniendo enfrente tanto al PSOE como al PP. Gracias por su ánimo.
26. Antonio (17.02.2008, 12:24): Señor alcalde, ¿es verdad que en sus planes esta dejar la alcaldía de Utrera en manos de Francisco Hurtado y presentarse usted a la presidencia de la Junta de Andalucía?

Ya le gustaría a algunos del PSOE que dejara la alcaldía. La verdad y la realidad es que tengo un compromiso con los utreranos y lo pienso cumplir.